Las diferencias entre los sexos en lo que se refiere al salario se están reduciendo gracias a la participación de las mujeres en la creación de empresas. Por ejemplo, recientes investigaciones han revelado que las compañías tecnológicas creadas por mujeres utilizan el capital y los recursos de manera más efectiva que aquellas creadas por hombres, lo que está impactando y cambiando las metodologías gerenciales en las empresas.

Además, gracias a una mayor participación femenina en el mercado laboral y su peso en la toma de decisiones sobre los hábitos de consumo en la familia, la influencia de las mujeres en los procesos económicos de nuestra sociedad es fundamental.

Sin embargo, aunque los cambios son evidentes, todavía no son suficientes. Una etapa clave para el cambio es un mayor acceso a la educación. Hoy en día, por ejemplo, en España las mujeres representan el 60% de los graduados pero solo el 45% del mercado laboral. En el nivel de dirección empresarial, este número desciende al 10%. Aunque la Ley Orgánica 3/2007 para la igualdad efectiva de mujeres y hombres establece que las empresas deben asegurarse de tener una presencia femenina del 40%, para 2015 todavía estaban lejos de ese objetivo.